Paddy´s day!

Al fin llegó el momento de resumir el calendario de festejos... Y poner las fotos. Todo empezó el viernes por la noche en que salimos por Temple Bar con María y Toni, que vinieron desde Alicante y Barcelona. Estuvimos también un buen ratito en el Clarence, al final no se pasó Bono...

El ambiente en Temple Bar

Toni y María, momento Beautiful Day

Momento Lost

El sábado por la mañana, con la cabalgata, empezó lo fuerte. No se podía caminar por la calle y tuvimos que asaltar los monumentos públicos (como todo hijo de vecino) para poder ver algo.

Saliendo de casa vestidos para la ocasión

Eladio con nuestro Leprechaun adoptado, el pobre Paddy, tan pequeño y ya fumador. Ojo al menda de detrás que se sentó sobre la visera del semáforo y se lo llevó la Garda de una oreja

Paddy y yo misma

Shamrock madness. Como diría Boromir: ¡Tienen un troll de las cavernas!

La cruz de San Patricio perseguida por el cuervo de Morrígan, ¿no debería ser al revés?

El ojo de Balor. No da casi miedo. Es hasta rico, parece un Casper. Muchos niños en la audiencia

Después nos fuimos a ver el partido en nuestro bar habitual junto a O´Connell, allí tocamos el cielo para luego bajar al infierno (ver reportaje en post anterior)

Ronan O´Gara en el partido

Celebrando los puntos de Irlanda. Oeoeoeoe...

El domingo, nuestro primer partido de Hurling. Granizo, nieve, sol de justicia... Four seasons in one day.

El hurling es un deporte gaélico que tiene dos mil años, el juego de campo más antiguo de Europa y que ya jugaban los héroes celtas en las sagas mitológicas. Aquí, Dublín Vs Galway. Ganó Dublín. La frase de Eladio: "yo no sé cómo en este deporte sobrevive alguien". Es verdad que esos palos por el aire parecen harto peligrosos... Chicos duros, estos irlandeses.

Un minúsculo jugador de hurling de unos cuatro o cinco años. Los pantalones son verdes, no se ven porque la camiseta le quedaba en plan camisón. En el descanso estas miniaturas salieron a mover sus camán (palos de hurling).

El City Hall iluminado de verde. Todo este fin de semana era verde: algodón de azúcar, barquillos, helados, los pelos de la gente, todo verde.

En el Wall of Fame del rock irlandés. Qué sería de un San Patricio sin U2

Y para terminar, una hermosa vista del Instituto Mount Temple. Aquí es donde se forjó la leyenda, cuando un adolescente Larry Mullen Jr. puso una notita en el tablón de anuncios, diciendo que buscaba gente para formar un grupo. Poco después se reunían los 4 fantásticos: el propio Mullen, Paul Hewson (Bono), Adam Clayton y Dave Evans (The Edge) en la casa de Larry para dar vida a uno de los mejores grupos de rock de todos los tiempos.